El parque de atracciones de Viena. Diversión en el Prater.

–¿Cariño, de lo que hemos visto en Viena que te apetece repetir?– El Parque de Atracciones mamá– , y así me contestó la niña, más clara que el agua, con una sonrisa de oreja a oreja, así que no pude resistir tanto encanto. ¿Te animas a conocer el Prater o Parque de Atracciones de Viena con nosotras?.

Prater

El Prater de Viena, es un espacio de ocio en el que está ubicado el parque de atracciones más antiguo del mundo, y donde además vas a encontrar uno de los símbolos más famosos y protagonista en un montón de películas y souvenirs de la ciudad: la noria gigante (Wiener Riesenrad).

Noria más antigua del mundo

Esta noria gigante no es una noria cualquiera, atentas porque estás observando ni más ni menos que la noria más antigua del mundo. Situada a unos 3 km del centro de Viena, la noria consta de 15 cabinas desde donde se puede disfrutar de unas vistas espectaculares tanto de la ciudad como de todo lo que este parque de atracciones puede ofrecer para la diversión de los niños. ¿De momento qué tal si damos un par de vueltas en una de sus cabinas acondicionadas para nuestra visita privada?.

Vienna City Card

Si si, como lo oyes, las cabinas de la noria, pueden reservarse con antelación para eventos, fiestas, cenas privadas e incluso bodas. Poder realizar allí una celebración es un lujo en todos los sentidos, pero lo habitual y sobre todo lo más económico (10 euros por adulto, 4,50 por niño) es acceder a uno de ellos junto con los demás turistas o visitantes.

Recuerda que normalmente suelen haber colas para subir a la noria, así que te va a tocar esperar un rato. La espera merecerá la pena. Por cierto ¿ y si te compras la Viena City Card o la  Vienna Pass?, te ahorrarás colas para comprar los billetes y además te saldrá más económico.

Vistas panorámicas

Cada vuelta tarda aproximadamente unos 15 minutos en realizarse completamente, tiempo de sobra para poder disfrutar de sus vistas e ir planeando desde las alturas cual va a ser tu recorrido en este antiquísimo parque de atracciones. Nosotros ya hemos elegido cual será una de nuestras próximas atracciones.

Bonito carrusel

Sentada junta a la ventana, veo desde lo alto como un carrusel, está siento protagonista de las sonrisas de los niños y eso me recuerda dos parques en los que tuve oportunidad de ir con mi familia el año pasado; uno en París con el Jardín D’acclimatation y otro en Navarra con Senda Viva.  ¡Qué bien se lo pasan los niños en estos parques! y qué suerte tiene Viena con esta noria tan exclusiva. Es una verdadera preciosidad.

Más de 250 atracciones

Y como decía anteriormente, ya sabíamos cual iba a ser nuestra próxima atracción, hacía buenísimo así que ésta tendría que ver con el agua. En cuanto salimos de la cabina nos dirigimos como un rayo hacia las barcas. ¡Qué mareo! ¡qué rapidez! ¡qué divertido!.

La entrada al Prater es gratuita, te permite dar un paseo por el parque de atracciones e ir pagando por la atracción que te apetezca disfrutar en el momento, o simplemente acceder a su área ajardinada para pasear y poder comer o cenar en algunos de sus restaurantes, tu vas decidiendo.

Y seguimos paseando por el parque y encontrándonos con un montón de atracciones, puestos de comida rápida, cafeterías, cuenta también con un Madame Tussauds y sobre todo con un enorme espacio verde. ¿Sabías que este parque es el doble de grande que por ejemplo el Hyde Park de Londres?. Mientras damos un paseo por el Prater, nos encontramos con un pintoresco tren que realiza el recorrido por allí y con un par de restaurantes con jardín donde decidimos quedarnos a cenar.

Mientras esperamos a que llegue la cena, la peque puede seguir divirtiéndose, en colchonetas y juegos varios. Como ves la diversión en el Prater no se acaba nunca. Después de cenar de lo más rico y sabroso en uno de sus restaurantes, volvemos hacia el parque y mientras lo hacemos vamos pensando cual será nuestra próxima atracción, y serán 2, una especie de tronquitos en el agua muy parecida a la que hay en Portaventura y otra como no podía ser de otra forma, la montaña rusa.

Risas y carcajadas

El día llega a su fin, la luz del sol en Viena se va alejando y eso hace que la noria empiece a brillar con un precioso color violeta. Nos lo hemos pasado fenomenal en el Prater, las risas y las carcajadas han sido protagonistas de un día increíble, pero tenemos que marchar, mañana nos espera otro gran día, así que aquí la última foto justo antes de coger el metro que nos aguarda justo en frente para llevarnos hacia nuestra próxima aventura por Viena.

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