Después de pasar una mañana increíble en la bonita Positano con la familia y amigos , nos tocaba decidir que ver por la tarde y elegimos Amalfi, ya que es la opción que te dan en las excursiones en barco y pensamos que por ello tendría que estar bien. Lógicamente no se equivocaban, nos gustó mucho la idea de pasar una agradable tarde entre simpáticas fuentes y ricos limones.
Y es que los limones inundan la ciudad con su colorido e invaden el aire con su aroma: jolín que poético me ha salido, pero es que es verdad la ciudad está llena de ellos y me encantó.
Nada mas llegar, aparcamos el coche en un parking al lado del puerto, donde vemos también que al igual que en el de Sorrento, está lleno de casetas que ofertan excursiones a diferentes lugares de la Costa Amalfitana, así que elegir Amalfi como lugar para alojarse y descubrir la costa, resulta ser también una buena opción.
Según empezábamos nuestro paseo por la zona, se descubría ante nosotros una peculiar iglesia, que además de bonita era enorme y preciosa. Esta iglesia preside la plaza de Amalfi donde encontrarás un montón de simpáticas y peculiares fuentes, además también hay muchos restaurantes, tiendas de souvenirs donde destacan sus famosos limones y subiendo a lo alto, unas preciosas vistas.
Esta fuente fue la mas peculiar de todas ya que estaba llena de pequeños muñequitos y a las niñas les gustó muchísimo.
En todas las fuentes encontramos agua potable y fresquita que nos vino muy bien para seguir saciando nuestra sed viajera
Con esta fuente en particular nos echamos unas risas, imagino que te habrás dado cuenta el motivo ¿verdad?
Pero si además la fuente tiene pececillos ya sabes, hay que dedicar un rato a darles de comer.
Las vistas desde lo alto, no podían ser mas bonitas y románticas.
Llegaba la hora de cenar, terminaba nuestra visita por Amalfi y elegimos seguir con Ravello, un pueblito de interior que se encontraba muy cerca, nos encantó. Desde este pueblo hay unas vistas increíbles a la costa, pero es que además es el típico pueblito que esconde millones de pequeñas y misteriosas callejuelas. Este tipo de pueblos interiores no muy lejos del mar, me encantan, y aunque son muy diferentes me recordó mucho a Bormes les Mimoses en la Costa Azul francesa o Frigiliana en España.
Ravello cuenta también en su plaza principal con una enorme iglesia, totalmente diferente a la de Amalfi, pero igual de bonita donde hicimos nuestro divertido jump y es que además habíamos cenado de lujo, lo que nos dio fuerzas para saltar muy alto.
Así que ya sabes, si estás pensando ir a la Costa Amalfitana y quieres preparar un planing recuerda, que puedes pasar un día increíble y muy intenso visitando Capri, Positano, Amalfi y Ravello con los niños. 3 de los lugares más bonitos de esta Costa italiana tan espectacular.
Categorías: Destinos con niños, Viajar con niños
Destino: Costa Amalfitana con Niños, Italia con Niños
Pero qué bonito.Las fotos preciosas,sin lugar a dudas un destino en mi lista de favoritos.